miércoles, 11 de noviembre de 2015

Reflexiones ST....



Resultado de imagen para amanecer en las montañas


César Ortega.
La Sociedad Teosófica no es una Institución común y corriente que pueda ser comprendida desde puntos de vista convencionales o mundanos. La mayor parte de su trabajo tiene profundidad difíciles de comprender, valores de carácter superior de naturaleza atemporal,  dado lo anterior puede ocurrir que surjan muchas confusiones en la interpretación de su servicio a la humanidad.

La ST basa su trabajo en el soporte de profundos principios que están orientados al desenvolvimiento interno de los seres humanos, entendiendo que los problemas que hay en el mundo son el resultado de las perspectivas parciales y fragmentarias que predominan todavía en las mentes de la humanidad. En este sentido la ST trabaja hacia las causas profundas de los problemas de la humanidad, sin distraerse con cuestiones superficiales o de forma.

La ST es una Institución muy particular cuyo trabajo está basado en un cambio interno en uno mismo, trabaja en la dirección de generar una madurez de carácter profundo en sus miembros, por esto y otras razones, es una Institución mucho más interna que externa. No queriendo decir con ello que la institución deba permanecer aislada del mundo.

Pero la Sociedad se va abriendo al mundo nuevamente en la medida de su desarrollo interno, no sale a hacer propaganda vacía de contenido o poniéndose un rostro atractivo externamente, sino que con toda honestidad y humildad hace sus aportes a la humanidad, sin falsedades o simulaciones. En este sentido la ST trabaja para no unirse a la corriente mundana del simple marketing, que busca generar un efecto falseando los hechos.

La ST  es una empresa, pero no es cualquier empresa, a la cual se le puedan aplicar medidas efectistas, que puedan hacer de ella un grupo “espiritual” más, como ya hay muchos en el mundo que no tienen principios éticos sólidos. El trabajo Teosófico depende enteramente de la responsabilidad y despertar interno de cada uno de nosotros, depende del florecer de una intuición e impersonalidad que cada uno debe desenvolver,  sin las cuales el trabajo Teosófico se vacía de contenido Espiritual o interno.

Por otro lado, se puede ver con claridad las complejidades por las cuales pasamos los miembros de la ST, en el camino a la madurez, al amor verdadero, al servicio desinteresado... todos nosotros pasamos por estas pruebas y complejidades que son  sin duda extremadamente exigentes para cada uno de nosotros.

Tal Vez la ST pueda adoptar políticas para hacerse más popular a los ojos del público y así tratar aumentar el número de miembros, pero puede que en el futuro seamos muchos más miembros, pero pagando el costo de alejarnos de los elevados propósitos de la Institución.

Sobre la difusión que es otro punto importante en el trabajo Teosófico debo contar una anécdota. La anterior presidenta Radha Burnier en su visita a Chile nos expresó frente a la consulta que le hicimos sobre el asunto de la difusión, la siguiente respuesta, “si ustedes tienen la miel, las abejitas vendrán”. Por supuesto que todos ese momento quedamos un poquito perplejos, pero después de analizar con la calma el asunto nos dimos cuenta que sobre la difusión y expansión de la ST intervienen factores internos, como la necesidad vital de hacer de la Teosofía una viviente energía en el corazón de cada uno de nosotros, la verdadera difusión es el modo de vivir de cada uno de nosotros.

Significa lo anterior que no debemos hacer difusión externa, naturalmente no, todos los grupos y Ramas Teosóficas deben hacer difusión pública, deben buscar canales de expresión de las enseñanzas y reflexiones éticas que la Sabiduría eterna nos expone hacia el público con los medios tecnológicos actuales y futuros.

¿Ingresan miembros a la ST, solo por la publicidad que hacemos?, naturalmente no, ingresan tal vez por las enseñanzas Teosóficas, por la atmósfera que impregna aquel grupo, o porque hay aquella miel de que nos hablaba nuestra Presidenta o quizás más seguramente por la propia madurez interna de quien se acerca a la Institución.

Muchas instituciones tienen “éxito“ desde el punto de vista externo en el mundo actual, pero eso no implica que tengan éxito en el mundo interno, es posible que muchos grupos sean numerosos porque en ellos no hay una exigencia interna de auto-conocimiento y también la necesidad de cambios en la naturaleza de los motivos más profundos.

Si los grupos Religiosos o de otra clase, que son numerosos en cantidad de miembros fueran exitosos en lo interno o Espiritual, la Sociedad Teosófica no sería necesaria y no hubiera aparecido en el mundo.

Es claro que la ST está al servicio del mundo, y que debe exteriorizarse y conectarse con el mundo, pero estamos en una época de marcado materialismo donde fácilmente se pierde lo esencial y se establece lo accesorio o lo que está de moda.

La ST prefiere sostener sus principios y valores fundamentales y no perder su esencia o Alma interna, prefiere pasar malos momentos y no entregarse a recetas que nos harían populares pero sin sustancia en el mundo de hoy.

Puede ser que lo que vemos como debilidad, sea nuestra fortaleza.
Puede ser que tal vez, no abundan personas que quieran hacerse cabalmente responsables de sí mismas en lo interno, puede que no sobren los individuos altruistas e íntegros dispuestos al olvido de si mismos. Y no digo con ello que los que somos miembros de la ST tengamos esas virtudes, sino, que simplemente lo estamos intentado y no siempre con buenos resultados.

Puede quizás, que ni siquiera haya muchos que quieran intentarlo, eso de tratar de trabajar en sí mismo, en los propios condicionamientos. Puede quizás que la Sociedad Teosófica no sea tan glamorosa a los ojos del mundo externo, porque pide a sus mst seriedad y altruismo real y no de forma. Puede ser incluso  que muchos de nosotros no demos el ancho, que no alcancemos el estándar superior y maravilloso que es el carácter interno de la Sociedad Teosófica, pero que aún seguimos tratando de ser merecedores de permanecer en ella.

El mero cambio externo o de políticas es claramente un asunto superficial, el mismo estado del mundo es un ejemplo de ello, puesto que vivimos una época de mucha confusión y cambios externos, pero que no afectan a la consciencia humana en su profundidad.

El trabajo de la ST es sin duda complejo, desde sus inicios hasta hoy, porque apela a la responsabilidad interna, a la regeneración profunda de la mente, apela a un cambio profundo y significativo en cada uno de nosotros, a un modo de vivir completamente diferente que va más allá del interés personal.

Entonces el asunto es si la ST es un grupo más que surgió para entretener a nuestros yoes personales con todo tipo de distracciones y juegos, naturalmente no. Nuestra Institución pone en nuestras manos las enseñanzas Teosóficas, las herramientas necesarias para que con nuestro esfuerzo transformemos nuestras vidas, como decía nuestra Presidenta anterior, por Servicio, estudio y Auto-conocimiento. El asunto clave es que hacemos cada uno de nosotros con las herramientas que recibimos, y esa es responsabilidad de cada uno.