sábado, 8 de octubre de 2016

COMPASIÓN EN LAS DIFERENTES TRADICIONES ESPIRITUALES





                                                                  Chittaranjan Satapathy

La compasión es una virtud en toda tradición principal y es también central en cada religión. La compasión implica un sentimiento de unidad con el otro, no solamente sentir piedad por alguien. En las tradiciones Hindú y Budista, la compasión se iguala con karuna. Una expresión diferente, daya, se usa para implicar misericordia, bondad y algunas veces piedad. Algunas de estas expresiones a menudo se usan de modo intercambiable, debido a la falta de claridad y comprensión más profunda. Las enseñanzas teosóficas valoran enormemente la virtud de la compasión para el crecimiento espiritual y la iluminación. En La Voz del Silencio, la que es un gran y final regalo de HPB para todos nosotros, se dice que la Compasión no es un atributo y no puede ser destruida. La Compasión es la Ley de Leyes – la Armonía eterna – la ley del amor eterno. En las Leyes de la Vida Superior, la Dra. Besant dice, ‘Toda escritura declara que el Corazón de la Vida Divina es Compasión Infinita. Compasivo, entonces, debe ser el hombre espiritual’. En vista de la importancia concedida a la compasión, estamos examinando la misma en el contexto de las diferentes tradiciones y religiones.
Hinduismo
En la literatura hindú clásica, la compasión es reconocida como una gran virtud y se expresa en diferentes términos, siendo los más comunes, karuna, daya y anukampa. Karuna implica particularmente un esfuerzo por comprender a otros desde su perspectiva. Palabras como karuna sindhu (océano de compasión) y karuna nidhana (morada de compasión) son los nombres dados a las importantes deidades hindúes Krishna y Rama. Buda llegó a ser reconocido posteriormente como uno de los diez avatares (encarnaciones) de la deidad hindú Vishnu. El Dasavatara Stotra (himno a los diez avatares) ensalza su compasión y los pasos que dio para detener el sacrificio animal. Estos ejemplos demuestran ampliamente que a karuna como virtud se le da suma importancia en el hinduismo. Los textos védicos ordenan extender la compasión no sólo a los seres humanos sino a todo ser vivo.
La compasión es un estado en el que uno ve a todos los seres vivos como parte de su propio yo y el sufrimiento de cada uno se ve como el sufrimiento propio. Se extiende hacia todos, incluyendo a esos que son extraños y aún a esos quienes pueden ser enemigos. Daya (compasión) se define en el Padma Purana como el deseo virtuoso de mitigar el dolor y dificultades de otros empleando cualquier esfuerzo que sea necesario. Anukampa , una expresión similar, se refiere al estado de uno después que ha observado y comprendido el dolor y sufrimiento de otros.
Por lo tanto, la compasión no es piedad (kripa) como implica el anterior sentimiento de unidad con el sufriente, mientras que la piedad puede sugerir solamente un sentimiento de pena por él acompañado de condescendencia. ¡Uno puede sentir compasión también!
Un antiguo texto hindú tamil, el Thirukkural que es muy popular en el sur de India dice:
‘Encuentra y sigue el sendero bueno y rígete por la compasión.
Porque si se examinan los variados caminos, la compasión resultará ser el medio para la liberación’.(Thirukkural 25:241-242)
Patanjali en sus Yogasutras destaca la importancia de la compasión (karuna)junto con las otras tres virtudes, es decir, maitri, mudita y upeksha.

Sikhismo 
El Sikhismo igualmente considera que la compasión es una gran virtud. El Gurú Granth Sahib continúa diciendo:
‘Usted no tiene compasión; la Luz del Señor no brilla en usted.
Usted está sumergido, sumergido en la maraña mundana’.
A un Sikh se le ordena sentir el dolor y sufrimiento de otras personas envueltas en alguna tragedia y la compasión se considera ser una cualidad divina. En la escritura Sikh, Dios es llamado mahadaial (super misericordioso),daiapati (señor de la compasión), y daial dev (dios compasivo). 
Jainismo
El jainismo acentúa la observancia de la compasión verbal y mental en añadidura a la compasión por todos los seres vivos. El Señor Mahavira adoptó la suprema compasión en su vida aún hacia las serpientes venenosas. La doctrina Jaina, ahimsa paramo dharma, proviene de la compasión por todos, la que impone que los seres vivos se presten servicio unos a otros.

Cristianismo
Las palabras hebreas y griegas traducidas como ‘compasión’ en la Biblia significan simpatía, misericordia y piedad. La Biblia describe a Dios como compasivo y benevolente, rico en amor, y su compasión se describe como inagotable, infinita y eterna. Se dice que la compasión surge dentro de nosotros cuando nos vemos enfrentados con aquellos que sufren y se produce acción para aliviar su sufrimiento. En la literatura cristiana, ser compasivo se iguala también con ser tierno de corazón y actuar bondadosamente. La compasión de Dios se da libre y tiernamente como la compasión de una madre por un hijo. La compasión de Dios se caracteriza por actos de bondad e interés por el sufrimiento humano. El deber hacia Dios en la literatura cristiana incluye la preocupación compasiva por la gente incluyendo al prójimo. A Cristo se le considera que es el Padre de la Compasión caracterizado por ideas de ternura y afecto, y a los creyentes se les pide ser imitadores de Cristo para vivir una vida de amor y solicitud para los demás. 

Islamismo
El islam es muy mal entendido en el presente a causa de los horrendos actos de terrorismo realizados por algunos. Muchas personas, tanto no musulmanes como también musulmanes, piensan erróneamente que el concepto de jihad es dominante en el islam. Sin embargo, esto no es verdad. En primer lugar, jihad significa esforzarse por servir a los propósitos de Dios. Se entiende que la jihad incluye deberes religiosos para mantener la religión como también la lucha interna espiritual, siendo la última más importante.
En segundo lugar, es la compasión la que representa el verdadero espíritu del islam como en el caso de otras tradiciones religiosas. En la tradición islámica Alá es aludido como el Misericordioso y el Compasivo. En el idioma árabe en que está escrito el Corán, las palabras usadas son Rahman y Rahim. Ciento trece capítulos del Corán de ciento catorce comienzan con el verso, ‘En el nombre de Dios el Compasivo, el Misericordioso’. Los musulmanes son instados en sus escrituras a mostrar compasión hacia todos incluyendo al pobre, las viudas, los huérfanos y aún los prisioneros. Ellos pagan zakat (dar obligado como contraste de sadaga – dar voluntario) que va en ayuda del pobre y el necesitado. Cuando ellos ayunan durante el mes de Ramadan, los ayuda a solidarizar con el dolor del hambriento del menos afortunado y aumenta su sensibilidad hacia el sufrimiento de otros. El Profeta Mahoma es aludido como el ‘Misericordioso del Mundo’. Se cita diciendo. ‘Dios, es más cariñoso y bondadoso que una madre con su querido hijo’. Como en el caso de otras tradiciones, en la tradición islámica también, la compasión que implica sufrimiento con otros se considera ser una virtud. Se dice en el Corán que Dios ha creado al hombre a su imagen y entre todas sus cualidades divinas, la compasión y misericordia se consideran las más elevadas. Por lo tanto, para un musulmán, la compasión y la misericordia llegan a ser los ideales supremos que realizar. No hay duda de que la compasión ocupa un lugar dominante en el islam junto con las virtudes de la misericordia afectuosa, solícita y mostrada hacia todos en la creación de Dios. El Corán acentúa particularmente la compasión hacia los padres, hijos, esposos, parientes, huérfanos, enfermos y sufrientes, vecinos y caminantes. Los sufís dan gran importancia a la compasión y su doctrina realmente fundamental que es llamada ‘Sulh-i-kul’, que es paz con todos, que en otras palabras significa no violencia y no agresividad.

Judaísmo
En la tradición judía Dios es invocado como el Padre de la Compasión y de aquí que sea aludido como compasivo (Rahmana). Los Rabis hablan de los trece atributos de la compasión. La idea de la compasión es equiparada con un sentimiento del padre con el hijo. La palabra Rihim proviene de la palabra hebrea Rehem, la madre. En el judaísmo la compasión incluye dolor y piedad por alguien en necesidad, creando un deseo de aliviar, y la falta de compasión es caracterizada por la crueldad. El judaísmo usa palabras como la compasión, empatía, altruismo y amor intercambiablemente. Sin embargo, un examen en profundidad aclara que la compasión es más que simplemente una emoción humana. La Cábala, la tradición mística judía lo pone de esta manera: ‘La bondad da a otro. La compasión no conoce a otro’. También se dice que la compasión es la base del amor.

Budismo
La compasión o karuna está en el mismo corazón de las enseñanzas de Buda. Cuando Ananda le preguntó si el cultivo de la bondad amorosa y la compasión es una parte de nuestra práctica, Buda respondió con lo negativo. Dijo que el cultivo de la bondad amorosa y la compasión no es parte de nuestra práctica, sino que es toda nuestra práctica.  Se dice que el último deseo del Buda fue aliviar el sufrimiento de todos los seres vivos en todas partes.  El Dalai Lama dice, ‘Si tú quieres que otros sean felices practica la compasión. Si tú quieres ser feliz, practica la compasión’. En el budismo, la bondad amorosa (metta/maitri) y la compasión son virtudes complementarias – la primera tiene la característica de desear la felicidad y bienestar de otros mientras que la compasión tiene la característica de desear que otros estén libres del sufrimiento que alcanza a todos los seres vivos.

Conclusión
En la mayoría de las tradiciones, la compasión se diferencia de la piedad. Mientras la piedad puede ser condescendiente, la compasión surge de un sentido de igualdad e interconexión de la vida.  La compasión presupone el respeto por la dignidad de la vida – la nuestra como también la de los demás. Como tal, la compasión tiene poco que ver con el sentimentalismo o mera piedad. La piedad, que surge de la emoción y sentimentalismo, no puede sola aliviar el sufrimiento y traer alegría. Por otra parte, la compasión pertenece a un nivel espiritual superior que surge de prajña o sabiduría. De hecho, la sabiduría y compasión van juntas y usted no puede tener una sin la otra. Es a través de la sabiduría, prajña, que uno comprende el sufrimiento de los demás y a través de la compasión uno ayuda a eliminar ese sufrimiento. Los iluminados permanecen con nosotros como maestros y liberadores a causa de su inmensa compasión, karuna. Los Grandes pueden verdaderamente ser descritos como la compasión encarnada.
 Se nos ha dicho que el camino más rápido al crecimiento espiritual es el sendero de la compasión. Y la razón de por qué esto es así no es difícil de adivinar.  A través de la compasión ponemos en uso nuestras facultades divinas más nobles y elevadas, asumimos la responsabilidad hacia uno y todos, responsabilidad universal si usted quiere, y que conduce al fin de la separatividad. Un estado de no separatividad, de identificación con todos, es una identificación segura de sabiduría. La compasión, la responsabilidad universal, la no separatividad y sabiduría son facetas múltiples de la vida espiritual. A esto se debe que la Teosofía, como también las tradiciones espirituales sin excepción, nos ordenan ser compasivos.